Santa Cruz Beach Boardwalk fue el primer parque que pudo reabrir en California en medio de las fuertes restricciones que impuso el estado por la pandemia del coronavirus. Sin embargo, la felicidad sólo le duró una semana, ya que tuvo que volver a cerrar debido al alza en los contagios de COVID-19.

Hay que decir que este parque del norte de California pudo volver a operar el pasado 7 de noviembre debido a su tamaño pequeño y a que el condado de Santa Cruz estaba en color naranja, pero desafortunadamente el condado volvió a rojo y el parque tuvo que cerrar de nuevo sus puertas el pasado 11 de noviembre.

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Y es que el nivel rojo en California indica una “propagación sustancial” del virus y especifica que los parques de atracciones no pueden abrir.

Así, las personas tendrán que volver a esperar para subirse a los juegos de Santa Cruz Beach Boardwalk, cuya principal atracción es la montaña rusa de madera Giant Dipper, construida en 1924.

Lo único que podrán hacer es ir a comer a sus restaurantes y visitar sus tiendas, entre otras actividades que no incluyen sus juegos mecánicos.

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Foto principal: Santa Cruz Beach Boardwalk